2020 y la Vida que debe madurar sin perder la inocencia del amor

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Que este año lleguemos sanos y salvos al año que viene

miércoles, 29 de febrero de 2012

grillos y telas










La Nochebuena de los vivos y los muertos









La nochees un lugar de encuentro de lejanos, extraños pasajeros.

Como un alma es la noche, oscura, confusa, llena de diamantes.

Los diamantes son los ojos tallados en nosotros de quienes ya no están en esta tierra pero están en las sombras, en el día de luz, en nuestro corazón.

La noche de Navidad es una fiesta a la que nadie falta, ni vivos, ni muertos, ni ateos, ni cristianos, ni judíos ni musulmanes, ni hindúes, ni budistas, ni ninguna tribu lejana y cercana del espíritu (Las religiones).

La otra Nochebuena con sus regalos de ocasión, árboles iluminados para la ocasión y manjares cocidos para la ocasión es sólo un diminuto festejo del que podemos participar o no, sin perder nada.

La fiesta es en el cielo del alma, en ese palacio. En la noche del alma, hacia donde confluyen los muertos y los vivos, todos vestidos diferente: velos islámicos; trajes judíos, sobrios; coloridas túnicas hindúes, algunas muy doradas; modestas telas budistas; occidentales vestiditos frescos de la gente de acá.

El sol sale para siempre esa Noche.